FORMACIÓN

Lo importante no es la realidad objetiva que vivimos sino la forma que tenemos de filtrarla y de sentirla. Aquí entran en juego nuestras creencias porque al afrontar cualquier hecho hacemos uso de ellas. Las circunstancias traumáticas generan respuestas emocionales que, si son suficientemente intensas y duraderas, activarán uno o varios programas biológicos de adaptación y supervivencia. De cuál sea nuestra reacción emocional dependerá en qué parte de nuestro cuerpo y cómo se manifieste dicho programa de adaptación.

Es por esto que un mismo hecho conflictivo puede dar lugar a distintas reacciones emocionales en una misma persona en distintos momentos de su vida, y también una misma circunstancia traumática puede tener distinto impacto emocional en varias personas y, por consiguiente, desencadenar diferentes programas de adaptación biológica o enfermedades.

El sentido biológico de los órganos y tejidos derivados de la capa embrionaria más tardía, el Ectodermo, es la relación con nuestros semejantes. Los síntomas que afectan a los tejidos y órganos pertenecientes al Ectodermo expresan conflictos de pérdida o marcaje de territorio, separación, identidad, amenaza y miedo.